Empacando la Navidad

Después de tanta fanfarria y algarabía es hora de volver a la normalidad o mínimo restaurar el orden en la casa y colocar cada cosa en su lugar como se debe.

La Navidad como siempre hace que esa parte oculta de nosotros a la que llamamos tiernamente “Comprador compulsivo+ adorador de las fiestas + ganas de adornar la casa” salga a la luz aunque sea en esta fría, breve y bella temporada, todo comienza cuando sentimos quela época esta cerca, o más bien nos damos cuenta que nos hemos quedado atrás en eso de adornar cuando las tiendas y las casas de los vecinos muestran los últimos adelantos en lucecitas y muñecos que saludan así que nos dedicamos todo un día a buscar y buscar (suele pasar o suponemos cada año dejar las cosas en un lugar especifico para el próximo encontrar los adornos fácilmente, pero año tras año es lo mismo) ya que lo encontramos a elegir entre los múltiples adornos si es el muñeco que nos regalo mamá o las luces que compramos etc, etc, …

Mi Navidad bien empaquetada

Ya cuando tenemos todo a acomodar se a dicho organizar y esparcir los múltiples objetos, pelearse con los foquitos que se enredan solos cada vez que los tratamos de desenrollar, desempolvar las figuritas, colgar las esferas, corona, sacar el arbolito y terminar en las ramas, todo con el fin de vestir la casa de la manera más linda posible.

No importa cuando empecemos a adornar el tiempo es subjetivo en esta temporada así que no importa cuanto tardemos el tiempo o transcurre o no transcurre, llega el gran día, y todos o que lindo, bellas figuras, mira las luces, o que lindo y todo lindo lindo, a ese día le sigue otro y otro y con cada día las luces se van desvaneciendo, esperando tristemente el momento en que sus luces se apaguen.
Listos o no listos el momento de recoger toda la Navidad, volver a colocar todo en las cajas de donde salieron y no solo lo viejo sino también una que otra cosa que nos regalaron (acaso las personas creen que no tenemos suficientes adornos) el problema es meter todo de donde salió, y si no cabe adoptamos una nueva caja o bolsa que termina como cada aña perdida entre todo el montón de cosas que tenemos.

Mientras recogemos podemos ir recordando el paso del tiempo “Como olvidarlo”, “Hace poco que paso”, eso si seguido de uno que otro suspiro cautivador.
Cada cosas en su lugar o simplemente donde quepa, no pueden esperar a que recordemos de donde sacamos todo o si?
Hay que empacar muy bien la Navidad, asegurarnos que este todo bien guardado, atado y hasta tal vez en su lugar, no podemos evitar que la Navidad se salga de sus cajas ya que esta nos puede causar adicción pos navidad.

Subir y bajar para trasladar todo, guardarlo y recordarnos a nosotros donde dejamos todo y hasta tal vez en ocasiones nos encontramos con la caja que estábamos buscando la volvemos a dejar en otro sitio prometiéndonos que para la próxima navidad no se nos olvidara…..
Espero y no se me olvide donde deje las cosas este año, mientras tanto mi navidad ya quedo empaquetada