9 Festival Swinger "Deseo"

Bienvenidos a la 9 emisión del Festival Swingres, y exacto, espere con mucha ansia que llegara otra vez este momento para leer y compartir con todos los blogers textos de gran calidad humana, en esta ocasión es para mi un gusto y una dicha tener a una chica maravillosa la Srita. Misbook que en esta ocasión nos viene a deleitar con este hermoso texto, espero y lo disfruten, pero antes de que lo lean un corte informativo a mi me podrán leer de otra chica bloger maravillosa Chocolate y Canela, así que no se pierdan este Festival y a leer se ha dicho.

"Deseo"

por Misbook

Siempre soñó con que algo mágico le ocurriera; su vida no era muy distinta a la de los demás, nunca pensó que el hecho de tener 23 años y no haber besado fuese algo que le marcara para toda la vida, pero si en algo se parecida a todo el mundo, era en su imperiosa necesidad de sentirse amada, aunque fuera una vez, aunque fuese un mes, aunque fue una noche.

Todos los años ocurría lo mismo, la víspera de año nuevo era frustrante: se reunía la familia en torno a la mesa y cenaban pollo al horno, abundante ensalada y mucha gaseosa, comida contundente para aguantar despiertos pasadas las 3 de la madrugada. Gran parte de las veces eran acompañados por la tia solterona: simpática, con estudios, con muchos viajes a cuesta, de hermosa tez blanca y pelo color claro, pero ante todo: solterona. Para cubrir la falta de conversación, encendían el televisor, después de todo ya era parte de la familia. Las típicas películas de romance, reencuentro y amores eternos eran el menú televisivo de temporada. la noche avanzo y era hora de tomar el vehículo y dirigirse al centro de la ciudad de Valparaíso, uno de los mejores puertos de país, reconocido por su excelente espectáculo pirotécnico. cada cual tenia en mente su deseo de año nuevo, apenas dieran las doce, en el instante previo, justo cuando los barcos callaban y apagaban sus luces, debían pensarlo, añorarlo con el corazón y seguramente el cielo se lo cumpliría.

El primer abrazo debía ser a alguien del sexo apuesto, Renata se ubico cerca de algún extraño bien parecido al que poder saltar apenas dieran las doce, no lo dudó ni un solo instante, este año empezaría distinto, su corazón se lo decía. La noche perfecta en su esplendor, irradiaba energía lunar por doquier, el aire soplaba lento y la brisa marina refrescaba su expectación. Comenzó la cuenta regresiva, la gente gritaba "10, 9, 8.." y su corazón latía mas fuerte. "3¡, 2¡, 1¡ feliz año nuevo¡¡" gritó toda la cuidad al unísono, cerro tras cerro la onda sonara recorrió todo cuanto le rodeaba y ahí estaba él, a su lado, ambos se miraron como inspeccionándose uno al otro, casi de manera involuntaria sus cuerpos se juntaron y él le beso. Los barcos se pagaron y todo el puerto quedo a oscura bajo aquel monumento a los héroes navales. Las sirenas marítimas daban el inicio a los fuegos y el cielo se encendía en luces vibrantes en colores impactantes y estruendosos reventares. Los segundos pasaban y la multitud lentamente dejaba los abrazos y buenos deseos para ver el espectáculo, sin embargo, para ellos el show debía continuar. Él se separo de ella por unos instantes, tomo su mano y le jalo entre la gente en dirección al cerro. El suelo repleto de latas de gaseosa, botellas de champaña, cotillon y cigarros les hacían adherirse al suelo levemente, él le miraba con su gran sonrisa blanca que iluminaba la noche y ella podía sentir el rebote de su largo pelo golpear contra su espalda tras cada paso. Se detuvieron justo bajo el portal del edificio de la intendencia, como testigos presenciales tenían las estatuas de Atenea a cada costado. él le invito a sentarse en las largas escalinatas, paso su brazo por el costado bajo de su espalda y le acerco a él con fuerza pero con dulzura. ella sonrojada se dejo acercar. "Soy Dago" dijo él como única presentación, ella respondió con su nombre. el juego de su mano con su pelo le ponía nerviosa, pero era su sueño cumplido.

El sonido de las batucadas bajando por el cerro los hizo dejar de mirarse con ensueño eterno, ella se levanto y se acerco al grupo de músicos bailando al ritmo de los tambores, él no se quedo atrás y danzaron juntos rodeados de papeles que caían del cielo y sonrisas de todos cuantos les veían.

Las horas avanzaron y pronto llego el momento de volver a la realidad. Ambos tenían sus zapatas en la mano y recorrían el camino costero arrullados por el sonido del mar, se detuvieron frente a la caleta Portales y se abrazaron de frente apretándose fuerte, él le beso una vez mas y le susurro al oído que al amanecer su sueño ya habría sido realidad, que no importaban las explicaciones, que él seria real para ella siempre. ella no lo comprendió, pero mientras estuviera aferrada al dueño de su primer beso no importaba nada mas.

Cuando el sol empezó a salir y el frio se iba paulatinamente, Dago le volvió a susurrar: "recuerda que esto es lo mas real que he vivido" y ella le beso. ambos cerraron sus ojos y sin soltarse continuaron unidos por unos momentos. repentinamente un extraño calor ascendió desde sus pies a su cabeza, le lleno de paz, de luz, de quietud, pensó que podrían ser los primeros rayos del sol, pero no. Abrió sus ojos y vio que aquel hombre con el que había pasado la noche se iba con la oscuridad, él se desvanecía como niebla, como un espejismo, como un deseo de año nuevo. ella lo entendió, era su sueño cumplido, sacudió rostro, miro al mar y continuo su camino. tal vez este año todo seria diferente.