2013, parte 2
(He intentado publicar esto desde hace dos días pero mi lap no me dejaba, así que hagan de cuenta que lo están leyendo el 14 de enero)
El 2012 se fue para quedarse, fue el año cabalístico del que contaremos que sobrevivimos a un fin del mundo, lo más curioso es la insistencia con la que muchos esperaban la llegada de esa fecha, existía en verdad el interés y el gusto por la muerte, la llegada de los extraterrestres, por lo inesperado, o por el simple gusto (inconscientemente) de ser parte de una moda colectiva, de una opinión pública general.
El 2012 se fue para quedarse, fue el año cabalístico del que contaremos que sobrevivimos a un fin del mundo, lo más curioso es la insistencia con la que muchos esperaban la llegada de esa fecha, existía en verdad el interés y el gusto por la muerte, la llegada de los extraterrestres, por lo inesperado, o por el simple gusto (inconscientemente) de ser parte de una moda colectiva, de una opinión pública general.
Han pasado catorce días desde que dio
inicio este nuevo año, es curioso como le damos la bienvenida, incrementa un dígito el año, pero lo recibimos como si en verdad un nuevo capitulo iniciara, como
si esa línea imaginaria entre el 2012 y el 2013 en verdad existiera, arrancamos
una hoja del calendario, le damos la vuelta a la siguiente página de la agenda,
amanecemos desvelados y tal vez hasta crudos, pero llega otro día, igual al
resto, con un mismo amanecer, un mismo sol. Pero creemos que lo pasado, pasado,
que todo lo malo se quedo en el 2012 y este nuevo año es para volver a
comenzar.
Fe y Esperanza, eso que aun tenemos y que confirmamos
año con año, el último minuto del año viejo y el primero del nuevo, ropa de
colores, sacar, meter, cantar, barrer, comer, compartir.
A catorce días del 2013, ¿porqué no creer
que todo será distinto?, ¿quién no lo impide?, solo nosotros.
Nos leemos en la próxima
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Esperamos siempre que un nuevo comienzo sea mejor que el final por eso quizás sea la manera de deshacernos de lo malo que dejó el año pasado sin pensar que en vez de malo podemos verlo como experiencia.
ResponderEliminarUn abrazo aki.
Sin duda alguna será un suceso para comentarle a nuestros hijos y nietos, superamos algo que se especulaba primero por unos cuantos, después por muchos más que se fueron uniendo a la sospecha del final de una era.
ResponderEliminarY aquí estamos, si fue falso o no (porque luego dicen los más desubicados que inmediatamente comenzó un mundo igualito jajaja) el caso es que podemos apantallar diciendo que sobrevivimos a ese 2012 que haya sido como haya sido, terminó, y estamos a 12 días de despedir el primer mes de este 2013.