Corresponsabilidad en la seguridad digital en las infancias y adolescencias
@AngieConter
“antes nos
divertíamos más”, no había tanta cosa virtual, “internet es muy peligroso”, “no deberían conectarse tanto” –pero
tienen todos los dispositivos-, “internet les hace daño”, estas son algunas
de las expresiones que nos dijeron en una consulta a madres, padres, docentes
para la prevención de la violencia digital en niñas y niños entre los 10 y 12
años que aplicamos en el 2021 y cuyos objetivo fue el conocer la percepción
sobre la violencia digital y los estereotipos de género para desarrollar una
aplicación digital didáctica y lúdica apoyada por Fondo Semillas.
Cuando estoy frente a grupos me gusta preguntarles ¿tenemos
derecho a acceder a Internet?, las respuestas son variadas, si analizamos sus
respuestas con otras miradas podremos ver además lo que implica el privilegio
del acceso.
Las respuestas como ustedes ya se pueden imaginar es que
todas las personas tenemos derecho a acceder, al acceder podemos disfrutar de
muchos más derechos, sí esos mismos que ejercemos en las escuelas, casas,
instituciones, vía pública, también deben ser respetados, gozados, defendidos,
luchados en Internet.
El problema es la misma jiribilla que tiene la palabra
acceso, acceder no significa que Internet sea malo, o que con el simple hecho
de entrar en automático todo será seguro, el acceso en las infancias y
adolescencias implica la escucha, comunicación, acompañamiento y un constante
aprendizaje.
Entonces, cuando hablamos de las infancias y las personas
adolescentes tendríamos que partir que tienen el derecho a acceder a Internet,
pero ojo, que aquí empieza ¿el problema?, ¿la solución?
Las niñas, niños y adolescentes tienden derecho al acceso
a la banda ancha y a las tecnologías de la información y comunicación, por lo
tanto, al tener este acceso les permite el ejercicio de otros derechos, como a
la educación, información, etc. Expuesto
lo anterior, existen al menos dos posturas, quien piensa desde los derechos sin
importad la edad y quién cree que debe existir la supervisión hasta los 18
años.
La pregunta que planté no tiene una sola respuesta, pero
si una serie de reflexiones que deberíamos empezar a hacernos, la escucha,
comunicación, acompañamiento y un constante aprendizaje es un trabajo que no debamos
dejar solo a las personas cuidadoras en específico a las madres y padres.
Existe además una brecha digital, las llamadas personas migrantes digitales y aunque ese término
no me gusta y no lo usaremos en este texto (el acceso lo entendemos no solo
como “acceder” sino desde un espacio holístico de acceso), esta brecha
imposibilita la comprensión de los riesgos pero también los beneficios del
acceso, las personas adultas sobretodo quienes actualmente conviven con personas
adolescentes o infancias, personal docente y otros actores que trabajan en el
cuidado crianza, constantemente se ven expuestos a cuestionarse “lo virtual”
Pero ¿a quién le corresponde el cuidado virtual?
Debemos empezar a hablar de la corresponsabilidad de la seguridad digital.
La corresponsabilidad es la distribución de tareas y
responsabilidades domésticas de forma equitativa y que implique por igual a
todos los miembros del grupo familiar. Este término lo hemos escuchado mucho en
los últimos años ante la apuesta de un Sistema Nacional de Cuidados y la
distribución de los trabajas domésticos de crianza y educación que han sido
asignados a las mujeres desde siempre.
Tomamos el concepto de corresponsabilidad para aplicarlo
en la seguridad digital como la distribución de las acciones y
responsabilidades que tienen todos los grupos de actores para lograr la
seguridad digital de las infancias y adolescencias.
Este concepto queda muy bien si nos basamos en el modelo
de gobierno de internet que funciona a partir del modelo de múltiples partes
donde todos los grupos de actores (academia, gobierno, comunidad técnica,
sector privado, sociedad civil y ciudadanos digitales) tiene una participación
horizontal en los diálogos y desde un modelo de abajo hacia arriba.
*en la
distribución de los grupos de actores dice “usuarios finales” pero me permití
una actualización al usar la frase “ciudadanos digitales” frase que escuché de
mi amiga Sara Fratti para reconocer que necesitamos que esos usuarios pasen a
ser ciudadanos al empoderarse de Internet (reconocer los derechos desde lo
digital)
Por lo que planteo que la corresponsabilidad de la
seguridad digital en las infancias y adolescencias busca justamente las
siguientes acciones que si bien es una lista plantea una primera reflexión:
-La seguridad no depende de un solo grupo actor.
-La seguridad digital no se logra solamente desde las
estrategias y candados técnicos que ofrecen las redes sociales y plataformas.
-La participación de todos los grupos de actores es vital.
-La participación activa de los intermediarios para
garantizar que desde sus plataformas y redes se están generando estrategias de reporte,
transparencia en los procesos, eficiencia en el tiempo de respuesta y promoción
de los primeros auxilios digitales (medidas de contención mientras se espera la
respuesta del reporte)
-La responsabilidad del gobierno para generar las medidas
preventivas, pero también de acompañamiento desde las denuncias para alcanzar
la justicia, reparación y no repetición.
-Es también responsabilidad de los gobiernos que las
instancias encargadas como policía cibernética, unidades de atención sexual,
dependencias de la juventud, mujeres, estén capacitadas y sensibilizadas en el
tema, etc.
-Acompañamiento de las madres, padres, personas
cuidadoras a las infancias y adolescencias.
-Alfabetización digital a todos los grupos y sectores
desde un enfoque holístico del acceso.
“empezamos
con ir a las tortillas, cuando llegamos a la computadora se nos olvida”, suelo usar esa frase cuando estoy en grupos de personas
adultas, seguramente muchas y muchos de las personas lectoras recordaran cuando
mamá nos mandaba a las tortillas y nos repetía una serie de recomendaciones,
cuidar el cambio, no hablar con personas desconocidas, cruzar con cuidado la
calle, cuando llega a nuestras manos un equipo digital la serie de recomendaciones
se nos olvida y suponemos que por ser nativos
digitales lo saben todo, probablemente sí, pero no todas las niñas, niños y
adolescentes tiene los mismos privilegios de acceso, entonces ¿Cómo vamos
accediendo a más?, ¿Cómo compartimos con información?, ¿Cómo nos mantenemos
presentes para cualquier cosa?, ¿de qué forma hablamos desde los derechos
digitales?
Abordemos los temas incomodos, esos mismos que siguen
siendo tabú y llevemos la seguridad a lo digital, cuestionemos los productos
que consumen las infancias y adolescencias y entendamos el juego de las redes,
pero no vamos a lograr nada de esto si no logramos entender que para lograr la seguridad
digital de todas las personas necesitamos corresponsabilidad.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por comentar
#BlogAngie