Lo discursos de odio, la privacidad, violencia | Caso Interjet vs Mireles
Inicio
este texto diciendo que estoy en contra de los discursos de odio y mensajes que
instan al odio, amenazan a grupos históricamente vulnerables y que promueven la
violencia a personas que opinan o son diferentes en género, religión, grupo,
etc.
Este
texto es parte de una serie de reflexiones que junto a mi querida amiga
@KaftSofit hicimos en twitter en una charla cafetera a la distancia. La
intención es seguir analizando este tema y por qué no crear toda una
investigación, manuales y más reflexiones.
Hace una
semana en medio de los festejos del inicio de la Independencia entre el tequila
y los fuegos artificiales, una persona escribió en su cuenta personal un tweet
donde deseaba que cayera una bomba al zócalo (palabras más palabras menos que
no son necesarias replicar) el tema ocasionó que la sociedad digital se volcara
a denunciar dicha violencia y sentimiento “terrorista” como un ejercicio de
estos dos últimos años fue etiquetada como Lady Bomba, el tema no quedo en eso,
se solicitó a la empresa para la que trabajaba que la despidiera por ese tweet,
pero el tema tampoco quedo en eso, le aplicaron el doxing (buscaron y
compartieron información privada, sensible de ella en redes sociales) y fue víctima
de mucho más odio del que compartió. Violencia finalmente.
Semanas
antes de este caso, Mireles un funcionario público hizo comentarios en
repetidas ocasiones que ofendían, estereotipaban y que son una ofensa para las
mujeres, en esta ocasión lo dice en persona y en un evento oficial como
subdelegado del ISSSTE en Michoacán, pese a las solicitud de grupos feministas
y de la sociedad civil de retirar de su cargo a una persona que se expresa así
de las mujeres este sigue en su puesto.
Debemos
empezar por ver el tema con una diferencia de tratamiento por género, en el
primero el mensaje aunque fue publicado en una cuenta personal a ella se le ha
etiquetado como lo peor del mundo esto
se debe a que de las mujeres siempre se espera lo mejor pero también una
devoción al silencio y somos expuestas al escrutinio público. Por ejemplo todos
recordaremos cuando en casa nos decían que las mujeres se veían muy feas cuando
decían groserías.
Y es que
las mujeres somos sometidas a juicios de valor muy constantes, han escuchado la
expresión “Querían trabajar verdad entonces
chingele chiquita”
En el
segundo caso esta normalizado que un hombre sobretodo una persona ya mayor se
exprese así de las mujeres, porque los hombres tienen permitido expresarse así porque
son los hombres y mostrar su masculinidad debe ser así.
Y aunque
uno de los discursos de odio se da en las redes sociales y el otro se viraliza
por que es grabado y publicado en las redes sociales ambos se prestan para
reflexionar cómo el uso de las redes sociales puede o no perjudicar nuestra privacidad
y libertad de expresión.
Veamos
entonces:
- Es importante que en este tiempo digital y de conexión tengamos acordado con nuestros empleadores el uso que le daremos a las redes sociales personales. Es decir lo que publico afecta a la empresa, debo usar mis redes personales para hablar bien de la empresa, debo mostrarme coherente con los valores de mi trabajo.
- Ejemplos muchos:
- Una compañía cerveceras que despide a sus empleados si publican una foto tomando cerveza de la competencia.
- Periodistas que no pueden compartir adelantos de sus notas en sus redes o que en sus publicaciones en redes sociales deben de agregar “a título personal”
- Por lo tanto ¿cuál es el protocolo que las compañías, empresas y empleadores deben de seguir para este tipo de casos?
- En caso de que exista un acuerdo previo sobre el uso de las redes personales ¿Cómo se da el monitoreo de las publicaciones de las personas empleadas y bajo qué valores se considera que algo es grave o no?
- En qué momento una sanción es desproporcionada o no, también en la semana que acaba de pasar en redes sociales anunciaban que habían corrido a una persona (empelada del gobierno) por criticar el vestido que usó la Dra. Beatriz en el Grito de Independencia, en el caso de Interjet se pedía a la compañía que despidieran y anunciaron su despido, en el caso de Mireles se inscribió a un curso sobre igualdad de género y no discriminación
Más allá
de que a la empresa o empleador le toqué tomar una medida ante un discurso que
contravenga los principios, valores de la misma hasta donde debe llegar su
injerencia, es muy probable que en el caso de Interjet de ser despedida (en
redes salieron a decir que no a habían despedido pero no pude corroborar la
información) muy difícilmente podrá tener otro trabajo esto se debe a la
exposición mediática que se ha hecho de ella.
¿Cómo
estamos gestionando nuestras redes sociales?, cómo entendemos la gestión de lo íntimo
y cómo se da este juego –a veces por demás malvado- entre lo privado y público
de nuestras redes sociales.
Y las personas
que usan sus redes sociales para su exposición pensemos en artistas, políticos ¿cuál
es entonces la gestión que deben de hacer?
Este tema
da para un análisis desde varias aristas y enfoques, creo sin duda que debemos
sentarnos a hablar cómo desde nuestras redes estamos gestionando nuestra vida y
cómo puede afectar a otras áreas como lo laboral y que decir de relaciones
personales como amistades o amorosas.
En esta ocasión
el texto concluye sin un final feliz ya que los ejercicios que hemos visto
hasta ahora son diversos en sí mismos y nos permiten seguir debatiendo desde las
diferentes posturas. ¿Ustedes qué harían?
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