¿Cuántas más?, ¿Qué tan mediático debe ser?, ¿De quién es la culpa?

 

Inicio este texto con muchas preguntas, como muchas de ustedes estimadas personas lectoras el jueves en la noche me fui a dormir con un hueco en el estómago, con la cabeza saturada y el corazón adolorido, no pudimos dormir pues esperábamos se confirmará lo que se suponía era un hecho, después de trece días encontraban a Debanhi, si no era ella sería una 6ta mujer localizada en la búsqueda de una.

En mis redes publiqué:

Todas y cada una de las mujeres localizadas tienen nombre, historia, no es un cuerpo más. Para el estado son un número, una ficha de desaparecida, una movilización que no se da, es un comentario de "se fue con el novio".

No somos un número, somos vidas.

Nos duelen todas y cada una, nos duele porque sabemos que todas estamos en riesgo, nos duele por que el estado no hace su trabajo y si lo hace es por la presión social y mediática que recibe un caso, nos duele porque el miedo se apodera de nuestras vidas, ¿Cómo podemos hablar de libertad y autonomía si nos hablan de miedo?

Algo ha cambiado y es el silencio, las calles se llenan de gritos, de denuncias, las redes de imágenes, las tendencias llevan varios días, las conversaciones de sobremesa, hablamos desde el miedo, ayer en una tienda de autoservicio dos empleadas hablaban, alcancé a escuchar su conversación sobre el miedo de dejar salir a sus hijas e hijos a la tienda, una de ellas contaba que se había peleado con el esposo por que mandó al niño a la tienda.

Comemos, respiramos, vivimos en un México que se ha convertido en una fosa, el estado no quiere ver, los medios revicitimizan y la ciudadanía es indiferente.

Y sí, aunque no les guste leerlo, somos indiferentes, una marcha visibiliza, pero ¿Cuántas están acompañando familias?, ¿Cuántas personas siguen compartiendo esas notas donde revictimizan, donde se narra con lujo de detalle los hechos?, ¿Cuántas personas siguen diciendo que se fue con el novio o de fiesta? Y cuando una mujer aparece con vida cuestionan para que tanto relajo.

Claro que debemos responsabilizar al estado, su única tarea es garantizar la seguridad, la justicia social y el bienestar en todas y cada una de los aspectos de la vida de las personas y no lo está haciendo, responden a la presión mediática y social y ¿Qué pasa con quien no tiene esos accesos?, ¿espera sentado?

Cinco los feminicidios reportados en Aguascalientes en los primeros 4 meses del 2022 y ha incrementado el triple en los últimos tres años, pero nos siguen dando paliativos, pulseras rosas para cuidarnos por que las únicas que sabemos cuidarnos somos nosotras. Cada semana imágenes y más imágenes de mujeres de todas las edades e infancias desaparecidas, cada día se nos va el aire al compartir estas imágenes y nos vuelve cuando se publica un “localizada”

Sí, aunque se moleste el estado, las redes entre nosotras es lo que nos ha salvado, pero no es vida vivir con miedo.

Si ustedes no hacen caso nosotras seguiremos hablando, seguiremos resistiendo, seguiremos viviendo por que vivir, reír, buscar la autonomía y que se garanticen todos y cada uno de nuestros derechos también es un acto de resistencia.

Hoy las nombramos a todas, y para aquellos que estén pensando “que exageradas, matan y desaparecen a más hombres” a ustedes les digo que no han entendido nada, esto no es un concurso de ver a quien matan más, a las mujeres las matan y desaparecen porque pueden, porque quieren, y mientras una este desaparecida y mientras exista un solo feminicidio vamos a seguir diciendo:

Nos queremos vivas y libres,