El día que me llamaron asesina
Sí soy
yo, esa a la que llaman asesina, a la que le desean que la violen para que
entienda lo que es ser una mujer de verdad, a la que critican por que “se
descontroló”, de la que dicen que antes era buena niña, es la vergüenza de su
familia, a la que le jalan el pañuelo en la vía pública, a la que le dan el
codazo, el empujón, el aventón sin querer, yo y muchas más somos esas.
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comentarios y muchos muchas veces compartidos los vídeos, las fotos, publicaciones con miles de comentarios, más 400 reacciones
la mitad de ellas “de me enoja”, audios que mandan a un programa donde dicen
que me van a violar, personas pidiendo que alguien les comparta mi nombre y
Facebook, los que me ubican y dicen que desde siempre he sido medio loca.
Me han
dicho asesina, loca, puta, han dicho que deberían abortarme.
Han dicho
sin conocerme que seguramente algún mal me antecede, que estoy amargada, que me
falta amor –claro el de un buen hombre heterosexual-, han compartido las
capturas de pantalla con mi rostro las envían a chats donde señalan, se burlan
mientras otras y otros solo observan, callan, pintan una sonrisa porque en el
fondo saben que están mal pero que no puedes decir nada porque si no te va
igual.
No
importan cuándo les esto, no importa quien lea esto, estas son mis palabras y
las de muchas más mujeres que sí todos los días somos agredidas por pensar
distinto, por creer que podemos retar no a Dios sino a los poderes
establecidos, porque nos tomamos muy en serio eso de luchar por nuestros
derechos, de opinar sobre nuestro cuerpo, de decidir, de tener nuestras reglas,
condiciones, porque nos atrevimos a soñar Aguascalientes sí puede ser un mejor
lugar.
Hemos
hecho de nuestro cuerpo un espacio político que se expone, que lucha que es
fotografiado y compartido, visto por miles y lo aceptamos pero no permito que
sobre mi cuerpo quieran imponer doctrinas, no acepto que amenacen mi cuero, mi
tranquilidad, mi vida.
Desde el momento
que las reglas de unos cuantos se quieren imponer y nos quieren seguir diciendo
que los cuerpos de las mujeres solo sirven para traer hijas e hijos al mundo.
Y lo
volveré a explicar, mis derechos no son una obligación para todas, luchar por
los derechos de todas es dar la opción a elegir, si quieres adelante no seras
criminalizada, si no quieres adelante sigue con tu vida.
Me han
dicho asesina, así como si se tratara de alguien que ha cometido un delito muy grave,
sí me han dicho asesina por luchar por los derechos de todas por animarme a
levantar la voz, nos han dicho asesinas por luchar contra el poder, sumar
esfuerzos, gritar juntas.
Sí somos
esas asesinas que buscan que nunca más una mujer tenga que salir a manifestarse
por sus derechos.
Sí, yo
soy esa asesina.
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