Educación sexual para decidir

Hasta la secundaria me explicaron cómo era una relación sexual y que era lo mismo que coito, tener sexo, hacer el amor, mi falta de educación sexual no era mera coincidencia, mi educación de primaria fue en un colegio católico.

Cuando tocó el momento de ver la unidad del aparato reproductor femenino y masculino las monjas enviaron a mis padres una carta en sobre cerrado preguntando si autorizaban que su hija tomara esa clase con el resto de la clase.
Mis padres aceptaron, mamá ya me había dado una charla sobre “ser señorita”, mi padre se limitó a decir que olía feo un día que estaba en mi menstruación –por años y me cambiaba de toalla cada hora-, volviendo al tema el salón se dividió y ante la curiosidad todas y todos tomamos la clase en dos grupos, niñas y niños.
Antes de la clase rezamos y le agradecimos a dios por nuestro cuerpo que debía ser instrumento para complacerle a él.
Y a ustedes ¿cómo les hablaron de educación sexual en sus casas?

Inicio este texto con este recuerdo de hace 17 años para que entendamos o al menos nos sirva como reflexión que aún hoy en día la educación sexual sigue siendo un temor, no la acción sino el miedo que nos da es hablar de sexo, educación sexual.

Seguimos escuchando a esas personas que creen que hablarles a las niñas, niños, adolescentes de educación sexual a muy temprana edad es promover el libertinaje, la promiscuidad y que se toquen, hablarle a la juventud es fomentar que quieran tener sexo a muy temprana edad y las personas adultas no hablan del sexo porque es un tema privado que solo se debe tratar en la cama y algunas personas siguiendo el precepto religioso de solo para la reproducción humana y todos los hijos que dios quiera.

Esas y muchas más frases siguen demostrando el terror que se tiene a hablar de un tema tan natural como lo es el sexo por lo que la educación sexual y su promoción sigue siendo parte de los debates actuales. Ciertas personas como el Frente Nacional por la Familia cree que promover una educación sexual en las niñas, niños y adolescentes es pervertirles y que se busca brincarse la autoridad de las madres y de los padres.

Al contrario, no estoy ni estamos en contra de una formación católica –o de cualquier religión- en el hogar (al contrario yo fui educada en un seno familiar católico y en m proceso diario de deconstrucción identificó que me sirve y que no) pero lo que sí es importante es que no se puede anteponer una creencia a una educación sexual laica, científica, con perspectiva de género y sin miedo.

Que los sistemas de educación promuevan libros de texto y una educación más abierta no quiere decir que estén cumpliendo una moda o capricho de grupos de izquierda que buscan la perversión de las mentes inocentes, lo que busca es aplicar las reformas que se han hecho  nivel constitucional y que obliga a una educación con principios en derechos humanos.

Creer que las niñas, niños, adolescentes y jóvenes no saben nada del tema es creer que el ratón de los dientes existe, es necesario que se trabaje en equipo con las escuelas pero también que desde el hogar se tenga un canal de comunicación que permita dialogar, cuestionar y aclarar dudas.

Hablar de educación sexual hoy en día también se convierte en una forma de prevención, de decirle a las niñas y niños que nadie sin tu consentimiento puede tocar tus partes íntimas y que de lo contrario tienen derecho a denunciar no importa que sean familiares porque la mayoría de las violaciones a menores e dan por un familiar cercano.

Y también tener información es prevenir el incremento de los embarazos adolescentes y en este tema me refiero a ellos, sí a los hombres que embarazan y desaparecen, los mitos y tabús que existen sobre el uso del condón. Además para un embarazo se necesitan dos partes, las chicas no se embarazan solas –o por obra del espíritu santo-.

El tema de esta semana viene como coincidencia para invitarles este 10 y 11 de septiembre a la 5ta Jornada de Salud Sexual que desde hace cuatro años diferentes organizaciones de la sociedad civil en conjunto con instituciones organizan en pro de los derecho sexuales y reproductivos de todas las personas.

Yo estaré dando un taller sobre cómo enviar contenido íntimo desde redes sociales.

Los derechos sexuales de todas las personas deben de ser reconocidos, respetados, protegidos y ejercidos plenamente, recuerda: Educación sexual para decidir (leedlo con el tono de consigna)